Tenía licencia por dolores al hígado y detective privado la sorprendió en bares: Bebió más de diez cervezas en un día
En España también ocurren situaciones insólitas relacionadas con el mal uso de licencias médicas. Así quedó demostrado con el fallo de un tribunal de Madrid al declarar como "ajustado a derecho" el despido de una trabajadora que, en vez de realizar reposo tras una operación, fue vista tomando cerveza en distintos bares.
La desvinculación ocurrió a fines de 2023, luego de que la empresa contratara a un detective privado para hacerle seguimiento y reunir los antecedentes, cuya contundencia fue suficiente para ponerle término a su relación laboral.
Reclamó contra su despido en un juzgado de primera instancia, pero sus argumentos fueron rechazados. Apeló en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y el resultado siguió siendo desfavorable: "Realizó actividades que retrasaban la curación y no eran acordes a su baja médica", decretó la entidad.
Paseos y cervezas, pese a licencia médica
Desde 2018, la mujer se desempeñaba como vendedora y encargada de tareas administrativas en una compañía dedicada a la venta minorista de calzado. En abril de 2023, se sometió a una operación por várices, obteniendo una licencia médica para ausentarse del trabajo y lograr que su recuperación fuera óptima.
LO ÚLTIMODicha licencia sugería "guardar reposo relativo, realizar paseos breves y mantener un dieta hepática (ingerir alimentos que no dañaran su hígado)", dado que también manifestaba dolores en ese órgano. Sin embargo, la paciente hizo todo lo contrario.
Sus jefes contrataron a un detective privado y, en un solo día, comprobaron que su dependiente estaba transgrediendo la licencia médica. Específicamente, el 17 de noviembre de 2023, el agente descubrió que:
- A las 11:29 horas de la mañana, se sentó en una terraza para beber cerveza con alcohol.
- Luego, bebió cinco botellas de cerveza con un acompañante, en dos bares.
- A las 13:09, otros dos botellines en un local distinto.
- Pasaron pocos minutos, y a las 13:33, con una amiga visitó otra fuente de soda para consumir tres botellines de cerveza.
- Este "tour" cervecero —contraindicado para los cuidados de su hígado— le tomó cerca de 7,5 kilómetros de caminata.
En su apelación al tribunal madrileño, su abogada aseguró que la conducta de la trabajadora "no fue tan grave" como para ser despedida, pero el desobedecimiento a la licencia fue tan evidente, que no pudo revertir la desvinculación.
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